En los procesos de fabricación de adhesivos cada vez es más importante trabajar con adhesivos sostenibles. Sin embargo, su significado puede variar según la perspectiva de cada individuo. Para algunos, implica reducir el uso de productos químicos potencialmente peligrosos en la producción; para otros, significa acortar los tiempos de fabricación y mejorar la eficiencia; mientras que para algunos, implica reducir el número de componentes, especialmente de plástico y mejorar la huella de carbono.
Entonces, ¿cómo influye la elección de un adhesivo en la sostenibilidad en todos los niveles?
Adesivos sostenibles en los procesos de fabricación
Un factor crucial es la forma en que se produce el adhesivo en sí. Los métodos de fabricación “tradicionales” enfrentan diversos desafíos, como el alto consumo de energía y la generación de residuos. Además, controlar las emisiones potencialmente dañinas puede ser problemático. En este sentido, se han desarrollado nuevos procesos de fabricación que abordan estos problemas.
Las técnicas más recientes, como las utilizadas en la fabricación de adhesivos de cianoacrilato (CA) a base de cianoacrilato de metoxietilo (MECA), no presentan estos problemas. Este proceso consume mucha menos energía que las técnicas convencionales, tiene un rendimiento más alto (estimado entre el 95 % y el 98 % de media) y genera menos residuos. Además, el proceso es más “limpio”, lo que permite un mejor control de las emisiones.
Tiempos de curado más rápidos
Otro factor importante es la eficacia de los adhesivos sostenibles. Un adhesivo con un tiempo de curado más rápido (sin perder eficacia) hace que el proceso de fabricación sea más eficiente.
En particular, en los adhesivos de cianoacrilato, la tecnología patentada “Light Cure” está siendo de gran ayuda en este aspecto. Con esta tecnología, el curado se realiza mediante dos mecanismos: luz (UV) y contacto (humedad), lo que permite una adhesión rápida y el curado rápido de las áreas expuestas a la luz. Esto tiene un impacto significativo en la sostenibilidad y eficiencia del proceso de fabricación, además de reducir costes.
El uso de lámparas LED para el curado ahorra energía (tanto con luz UV “tradicional” como con sistemas de doble curado más modernos) y es más eficiente debido a su penetración más profunda. El proceso dual es más rápido y utiliza menos energía que los sistemas UV convencionales, siendo aún más eficiente al no requerir post-curado.
El rendimiento del adhesivo afecta la sostenibilidad de diversas maneras. Por un lado, se reduce el volumen de adhesivo aplicado, ya sea con equipos manuales o automatizados. Por otro lado, la tecnología de doble curado permite el montaje de múltiples sustratos en una misma producción, algo difícil con piezas de sujeción mecánicas.
Así, materiales como vidrio, metal, plástico, cuero e incluso textiles pueden unirse con precisión, permitiendo la fabricación de productos con diseños complejos. Esto incluye artículos como frascos de perfume que combinan metal y vidrio, dispositivos electrónicos, artículos de lujo y componentes automotrices.
Reducción de residuos
Los adhesivos a menudo ayudan a reducir residuos al eliminar la necesidad de soldaduras o tornillos. Aunque en algunos procesos, como el ensamblaje de fuselajes de aviones, se pueden usar remaches junto con adhesivos. Los procesos de curado bajo demanda de alta precisión también excluyen los adhesivos no curados de los sustratos unidos.
La nueva generación de adhesivos contribuye a reducir el número de piezas y componentes en productos finales, simplificando y racionalizando los diseños. Esto no solo hace que los productos sean más ligeros, sino que también requiere menos energía para su fabricación. Menos piezas significan un uso más eficiente de los recursos y menos residuos, mejorando las credenciales de sostenibilidad del fabricante. Además, la aceleración de las líneas de producción contribuye a aumentar los márgenes en negocios donde los márgenes a veces son bajos.
En conclusión, la nueva perspectiva en el desarrollo de adhesivos sostenibles está ayudando a los fabricantes a alcanzar objetivos de sostenibilidad y a ofrecer procesos de fabricación más eficientes a sus clientes, contribuyendo así a un negocio más sostenible en su conjunto.